Tal vez el significado de escritor sea muy subjetivo y polémico en la cotidianeidad: "persona que escribe, autor de obras escritas o impresas" - nos dice la RAE. Personalmente, considero escritor a quien puede vivir sumergido en este maravilloso y sublime arte; es decir, que su actividad principal sea la creación de obras literarias sin importar el género ni la extensión de estas.
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Por lo dicho anteriormente, la presentación más acertada sería la siguiente: soy Grémil Martín Garay Ríos y soy aspirante a escritor ; y Quijano, mi alter ego que transita por los extensos pasadizos de la locura como el magnánimo personaje de Cervantes.
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Quijano, seudónimo basado en el Quijote de la Mancha, es la representación de la lucha interna entre la utopía humanista y la aceptación de un mundo moderno y sus características. Es motivado, además, por la demencia para plasmar sucesos, momentos, pequeños instantes de los que está hecho el mundo, influenciado por autores de distintos rubros que marcaron mi incipiente vida literaria tales como: Sabina, Ribeyro, Saramago, García Márquez, Allan Poe, etc.
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Y sí, hay que estar demente para realizar un blog de literatura en un mundo vertiginoso donde las imágenes priman antes que las letras. Sin embargo, la pasión por la escritura - la cual nació en la niñez y tomó mayor fuerza en la adolescencia - además de las ganas por ser un pequeño fulgor de cultura, motivaron para exhibir a la luz LA MANDRÁGORA.
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Por último, debo decir que este blog, es el inicio de un largo camino literario lleno de temores e inseguridades y seguramente de una lucha constante con los sin sabores propios del inicio de algún proyecto que son totalmente superables; en mi caso, armado solo con un lapicero y un papel.
